tag:blogger.com,1999:blog-29040931888741617982024-03-19T03:47:58.741+01:00Empiezo historias, termino algunas.Lugar de historias y relatos cortos. Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.comBlogger51125tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-28248457263533817912013-01-26T22:52:00.000+01:002013-01-28T16:53:40.808+01:00El otro monje de Los Cobos.
- El secreto está en la muñeca.
- Ya lo veo. - Dirigía mi mirada a la mano en la que sostenía el dardo.
- ¿Qué ves? - Ella, aunque aun miraba a la diana, sonreía.
- Pues que no mueves la muñeca para nada. - Se empezó a reir - ¿No es eso? Si te fijas, lo único que haces es girar el codo para lanzar el dardo...
- Con "muñeca", me refería a una Barbie que me regalaron cuando era una Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-1047774080209987842013-01-15T20:30:00.000+01:002013-01-21T19:58:32.969+01:00El pirata de La Sola
- Y ahora sólo puedo decir: adiós amor, adiós. Hemos compartido juntos tantos momentos, hemos ido a tantos lugares y hemos visitado tantas ciudades que hoy, el día en el que nos separan, únicamente puedo mirar atrás y comprender, de la forma más amarga posible, que nunca podremos repetir experiencias similares a las que hemos vivido hasta ahora.
Lo has sido todo para mi, Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-88025186939006758052013-01-07T22:15:00.002+01:002013-01-08T10:22:35.330+01:00El oro de la Torre del Oro.
Corriendo detrás de La Verdad, entendí la teoría de Einstein: era imposible acariciar o tocar a esa perra. En lugar de "La Verdad" deberían haberla llamado "Escurridiza", "Babosa" o "Cansina" por poner algunos ejemplos de nombres que combinaban mucho más con la personalidad de la perra de mi amigo.
Se trataba de una galga corriente y moliente que Einstein llevaba a cazar Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com8tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-57374510526651481222012-12-31T15:45:00.000+01:002012-12-31T16:37:04.830+01:00El monje de Los Cobos.
- ¿Estás segura de que no nos conocemos de antes?
La miraba a la cara, sonriente y sin complejos, pero los pistachos que tenía por ojos me atravesaban con una mirada de esas que fulminan. Ni siquiera se volvió del todo para contestarme, no le hizo falta, las esmeraldas que tenía en la cara hablaban por ella.
- Mala frase para ligar ¿verdad? - Traté de mantener la sonrisa.
- ¿Tú quéManuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com8tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-54990596043577532962012-12-27T21:26:00.002+01:002012-12-30T13:10:04.750+01:00El faro de la isla Estornuda.
Historia dedicada a aquella persona que, sin querer, me dio la idea para hacerla.
Esa persona que me alumbra el camino cuando el mar me hace zozobrar.
I.- Introducción.
He ejercido muchas profesiones a lo largo de mi vida a pesar de que actualmente no es eso lo que las empresas desean escuchar cuando te hacen una entrevista de trabajo. Ahora, lo que las empresas buscan es a un Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-31901448958488403082012-12-17T00:48:00.000+01:002012-12-27T21:54:07.473+01:00La extraña pero curiosa historia del R5.
Sevilla, 2002
Nunca había deseado tanto estar de vuelta. El ronroneo del coche le acompañaba. Atrás quedaba la casa paterna que cada fin de semana visitaba. El lunes se abriría como tantos otros: libre de imposiciones, haciendo las cosas a su ritmo.
Luis llevaba más de una hora en carretera y estaba a punto de llegar. Había decidido parar la radio para escuchar detenidamente Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com16tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-6338951384380647372012-12-11T22:21:00.001+01:002012-12-11T22:21:10.979+01:00El pequeño (e ingenuo) bailarín de claqué
Érase una vez que se era un pequeño bailarín de claqué que un buen día decidió dedicar unas cuantas de horas a la semana a ejercitar su cuerpo en un gimnasio.
La primera vez que entró, el pequeño bailarín de claqué se quedó muy sorprendido de la cantidad de máquinas que allí había. Él no sabía para qué servía ninguna, así que decidió ir a preguntar a la primera persona que allí encontró.
Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-51545633735816533582012-11-14T20:21:00.000+01:002012-11-14T20:21:41.829+01:00¿Pájaro, árbol o mala hierba?
Imaginad una isla. Una isla a la que no haya llegado aun la mano del hombre. Una isla en la que los seres que la habitan viven en armonía dentro de un ecosistema en el que todos dan y reciben de todos. Un intercambio mutuo, una supervivencia en conjunto.
Sin embargo, en este ecosistema, evidentemente, hay seres que aportaban más a aquella comunidad y otros que no Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-162342833419794212012-11-13T09:31:00.000+01:002012-11-13T09:31:25.930+01:00Se acaba el tiempo.El lúgubre ambiente que reina en la sala es rematado por el humo que se desprende del cigarro instalado en la mano de aquella chica que custodia en su mirada toda la tristeza que se abre paso ante sí.
A través de la ventana, un niño de unos cinco años camina cabizbajo arrastrando lo que pareció ser en su momento un pequeño peluche de color naranja. Ahora el muñeco es un tétrico trapo Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-55536308810452895652011-12-31T03:18:00.003+01:002011-12-31T03:55:39.896+01:00El señor Delfin en el parque de María LuisaEl señor Delfín era un hombre mayor que se hacía notar allá donde iba, aunque él no lo pretendiera. Él siempre creía vestir de una manera con la que pasaba desapercibido.
Lo cierto es que normalmente usaba ropa negra, pantalones y americana, mezclada con sus camisas blancas que, con el paso del día, iban soltándosele de debajo del pantalón, lo que le daba un aspecto bastante desaliñado. A eso Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-81128273365071099752011-10-24T22:50:00.001+02:002011-10-24T22:50:24.784+02:00...de poder.Valiente, seguro de si mismo, decidió desembarcar de su nave para adrentarse en esa espesa selva consciente de que lo que veía tras ella, en el horizonte, era el lugar que había estado buscando durante años.
Pero la selva era densa, se sentía observado por los innumerables animales que podía habitarla. Lobos, serpientes, hienas, panteras, cocodrilos y todo un helenco de maquivélicas bestias Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-40467920074359231982011-04-06T16:53:00.001+02:002011-04-06T16:55:01.143+02:00Poner los pies en el suelo.Cayó, cayó y cayó y una hoja enorme paró su caída. Se levantó y oteó el horizonte. No veía como seguir bajando pero tenía que hacerlo. Comprendió que el mejor camino era seguir cayendo, así que se abalanzó sobre el vacío y siguió cayendo. Esta vez fueron un par de metros. Aterrizó sobre una enorme rama que le enseñaba el camino hasta el tronco de aquel gigantesco árbol. Enseguida pudo ver la Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-16558276366944683782011-03-06T02:49:00.000+01:002011-03-06T02:49:53.928+01:00Humanos.
Las cicatrices del único árbol que quedaba en el mundo contaban historias sobre las peleas entre gigantes, entre monstruos iracundos y despreocupados que no veían más allá de sus propias narices. Monstruos derrotados por sí mismos, monstruos que terminaron por creerse sus propias mentiras.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-47299900553363927362011-01-24T23:52:00.001+01:002011-01-24T23:53:53.402+01:00La otra fábula del ratón y la serpiente. (Final alternativo)Hace mucho tiempo, en un lugar muy muy lejano, una pequeña serpiente se arrastraba hambrienta por las arenas de un desierto inmenso. Su avance era lento y fatigoso, el sol era un verdugo imperturbable. Por suerte para ella, su corta vida había transcurrido siempre alrededor de aquella zona, lo que hacía que la conociese bastante bien. Fue por esto por lo que supo que a unos cien metros del cactusManuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-17075851908984615642011-01-22T18:22:00.000+01:002011-01-22T18:22:27.589+01:00La fábula del ratón y la serpiente.Hace mucho tiempo en un lugar muy muy lejano, existía un pequeño ratón que correteaba perdido en la inmensidad de un desierto. Hacía calor y estaba cansado por lo que, cuando vio un pequeño caserón abandonado en la lejanía, no dudó en llegar hasta él para poder dejar reposar sus patitas.El caserón estaba oscuro y olía como si no hubiese sido pisado por nadie durante mucho tiempo. Al menos, eso leManuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-28286011660081771352010-12-30T23:44:00.002+01:002010-12-30T23:56:58.083+01:00Paloma y su pequeño rock and roll.Mi vida, fuimos a volar
con un solo paracaídas.
Uno solo va a quedar
volando a la deriva.
"Paloma". Andrés Calamaro.
La habitación estaba oscura. Las noches en la cuarta planta del hospital eran mucho más tranquilas de lo que solían serlo en la unidad de cuidados intensivos. Él se permitió el lujo de cerrar los ojos. Había sido un día duro de trabajo y, pensando en ello, se acomodó Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-79215954693240730702010-11-30T17:51:00.007+01:002010-11-30T19:57:04.543+01:00La torre del homenaje.Las ruinas del viejo castillo se ubicaban en lo más alto de un monte casi inaccesible. Las rampas que conducían a él habían sido invadidas por la maleza de la montaña y el empedrado que las componían habiá sido levantado por las raíces de los árboles que, en hileras, acompañaban la subida. Las nubes encayaban en la torre del homenaje, que aun se mantenía en pie sobre un risco de piedra Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-62806996701686231832010-11-26T19:17:00.002+01:002010-11-26T19:22:24.509+01:00Invisible.Apagó la luz y se sumergió en la oscuridad de la noche. El coche recorría las calles de la ciudad como un fastasma deambula por los pasillos de un viejo caserón.Se sentía invisible.Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-383141574388501672010-11-18T23:53:00.005+01:002010-11-19T10:46:12.865+01:00La Trama XI. Una coincidencia.En capítulos anteriores.Laura es una chica que se ha visto perjudicada por la huelga de trenes. Ha tenido que coger un autobús repleto rumbo a Sevilla en la estación de Córdoba. Allí mantiene una breve conversación con una anciana que resulta ser la abuela del tipo (Édgar) que en los andenes mira cómo el andén número 22 no existe.El autobús termina teniendo un accidente junto a un pueblo. Laura Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-39192057471581146492010-10-14T00:48:00.002+02:002010-10-14T00:51:59.232+02:00Un hermoso defecto.Tengo el defecto de pretender que todo aquel que esté a mi lado se encuentre lo más feliz y cómodo posible. El problema es que en ocasiones termino olvidándome de mi.Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons. Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-53363885502860376042010-09-21T00:15:00.004+02:002010-10-11T09:48:12.408+02:00Horizonte.El horizonte es algo intangible, infinito, lejano. Lo paradójico de esto es que lo tienes siempre delante. Si un día quieres ir al horizonte solo tienes que empezar a andar. Una pierna delante, apoyas en ella el cuerpo y adelantas la otra. Parece fácil pero cuesta dar ese primer paso. Esos primeros pasos. Como en un día de nubes y claros en el que nunca rompe a llover, las piernas nunca se Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-42880702265049071872010-09-18T01:05:00.003+02:002010-09-18T02:08:24.906+02:00Va de comedias.Una comedia es aquello por lo que uno lucha para poder reírse. Está llena de enredos, entuertos, malos entendidos y finales más o menos coherentes con lo que Disney nos contó que debe ser la felicidad.Un amor consumado en una pareja unida -si es estadounidense, mejor casada y por la iglesia-, el nacimiento de un hijo sano y fuerte, una graduación, el primer beso o la pérdida de la virginidad Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-21276449386946572442010-07-31T02:14:00.012+02:002010-07-31T18:46:45.189+02:00La Trama X. Damián.Era la enésima vez que tomaba aquel desvío de la autopista, pero aquella era especial. A penas quinientos metros más atrás había tenido lugar el accidente del autobús en el que viajaba Laura, su sobrina. Precisamente en aquel lugar, precisamente ese autobús, precisamente aquella noche. Damián estaba muy preocupado. Necesitaba comprobar que dejaba todo en orden antes de seguir su camino hacia Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-26474976614839752192010-07-20T23:57:00.002+02:002010-07-21T00:29:45.830+02:00Braulio¿Sabes cuándo uno aguanta y aguanta hasta que ya no aguanta más?Es como cuando te tiran chinitas y chinitas hasta que te hartas de que te tiren chinitas. Hay quien, cuando se harta, lo dice y pide que se le deje en paz. Hay otros que, cuando se hartan, empiezan a devolver las chinitas con más fuerza, sin nisiquiera molestarse en decir que se les ha molestado.Braulio era el típico tipo de persona Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2904093188874161798.post-21005653504716495932010-06-01T20:00:00.005+02:002010-06-01T21:03:26.831+02:00La Trama IX. Al despertar.El intransigente latido persistía gracias a sus esfuerzos. La noche había transcurrido eterna, alternando sonidos y silencios. Seguía viva sin saber muy bien dónde. Al atardecer, se había apagado la luz, sus ojos cedieron. Luego, alguien la cogió. Después sonidos, voces y otra vez el motor de un coche. Cuando todo se detuvo, abrió los ojos y sólo encontró oscuridad, sólo una habitación.Uno a uno,Manuel Granadoshttp://www.blogger.com/profile/17840056589865453807noreply@blogger.com3